Salida de una de las categorías infantiles.
Para lo que es la población de la capital financiera suiza, la afluencia de 19.945 corredores inscritos ( cifras oficiales ) es bastante elevada. Pero como en la mayoría de los países europeos, hay una gran cultura del deporte también aquí, por lo que no es raro que la afluencia a estas carreras sea masiva.
Quizá la diferencia más grande con respecto a las San Silvestres españolas es la gran cantidad de categorías disponibles al realizar la inscripción ( más de 20 ) como alternativa a las cajas de salida de otras carreras. Esto es un gran acierto desde luego, ya que todos hemos vivido esos cajones atestados de corredores que sólo quieren estar en sitios avanzados por salir antes sabiendo de primeras que no van a mantener el ritmo correspondiente, molestando al resto de los runners.
El recorrido tenía lugar alrededor del Limmat, por el centro de la ciudad, a través de calles estrechas y dos de las calles principales (Bahnofstrasse y Limmatquai). Dependiendo de la categoría, se darían más o menos vueltas al circuito hasta un máximo de 4 para el recorrido de 10KM.
Para la recogida del dorsal se había preparado la típica feria del corredor, pero en un formato pequeño. Si estáis acostumbrados a las carreras que se organizan en Madrid, os parecería irrisorio el tamaño de la de aquí (en total habría unos 12 stands como mucho), pero funcionalmente era impecable, ya que en ningún momento llegué a apreciar ninguna cola. El ambiente era buenísimo y más ordenado que en España, como ocurre normalmente por aquí en cualquier evento, ya que la cultura es distinta en este sentido.
Como puntos a mejorar, cabe destacar que en la categoría de 10KM hasta el momento de cruzar la meta no podias conseguir nada de avituallamiento. De manera que si no te habías preocupado de estar bien hidratado a la hora de la salida, podrías llegar a pasarlo mal si estás acostumbrado a una hidratación contínua. Ademas para los 47 francos suizos de la inscripción junto que uno de los grandes patrocinadores era MIGROS (la gran cadena de supermercados suiza) lo convertía en un gran punto negativo.
Otro de los fallos fue la elección del recorrido. Exceptuando la parte que transcurría por Limmatquai ( la calle es bastante ancha ) el resto del trazado era bastante estrecho. El centro de Zürich no es demasiado amplio y si además de esto le sumamos que en alguna calle se corría por la acera ya que no cortaron el tráfico, el espacio queda bastante más reducido.
Por todo lo demás, muy bien. Como ya he dicho, gran ambiente, gran organización, trazado bastante agradable (con sólo una pequeña subida importante) y con la suerte de tener un buen tiempo atmosférico (a pesad de estar a 1ºC no había niebla ni llegó a llover).
Para mi, tenía muchos ingredientes que la hacía especial y que me empujaba pensar en ella por todo lo que me ha pasado personalmente hasta llegar a este punto. No era un desafío de distancia, eran sólo 10 KM por un recorrido muy asequible. Ni tampoco tenía pensado batir ningún récord de tiempo, ya que mi última referencia en esta distancia es de hace más de 6 meses, con un verano bastante intenso y con poco tiempo para entrenar.
Ademas el pasado mes de Abril sufrí una ruptura del maleolo externo del peroné de la pierna derecha corriendo la Maratón del Rock and Roll de Madrid en plena ascensión de mi forma física y preparación. Fue un palo moral, ya que era mucho el trabajo hecho hasta entonces y que se iría al garete con la recuperación (pierna escayolada durante dos meses) y debido a mi futura mudanza a la capital financiera suiza, me quedaría bastante de por medio para recuperarla.
Pero al parecer, la recuperación fue bastante bien. Esta era mi primera carrera internacional y mi primera después de salir de la lesión, por lo que la motivación era bastante alta, aún sin ningún objetivo de tiempo concreto. Con los nervios de volver a "debutar" y de probarme arranqué con muchas ganas y buen ritmo. Hasta llegar a la primera curva, donde ahí aprecié lo erróneo del trazado marcado por la organización, ya que pasabamos de trotar por una calle completa a ocupar solamente una acera, con su correspondiente tapón de corredores.
Esta situación se volvería a marcar en varios momentos puntuales en los primeros kilómetros haciendo que por un fallo de organización los corredores perdieran segundos, incluso algún minuto. Pero aún así, la sensación y el ambiente ayudaba a pensar en positivo. Gritos de Hopp!, Hopp! (Vamos, Vamos en suizo) te empujaban cada vez más durante todo el recorrido.
Finalmente conseguí rebajar mi marca personal de 10KM en un minuto ( hice 51:19 ) en una carrera en la que los dos primeros kilómetros la corrí a 6"/km, convirtiendo esos pequeños fallos de organización (recorrido, avituallamiento) en anécdotas.
Poco a poco iremos cerrando fechas de alguna carrera más y otras competiciones por tierras suizas, de manera que si te coincide por aquí o quieres correr alguna, dejanos un comentario y podemos ir juntos hacia la meta!
Enlaces:
http://nikeplus.nike.com/plus/activity/running/Luisen.ramos/detail/9922000000017031743430044352253398053677